Colección «serpientes».

Usted se mueve en silla de ruedas, le toca sortear obstáculos urbanos, le salva su cuerpo atlético, su forma magistral de asumirse en un espacio que no le consideró, le falló la ciudad, pero usted se abre camino, usted es un peatón más de la Ciudad de México.

Recientemente este tramo de banqueta fue mal reconstruida por la Delegación Gustavo A. Madero (la obra concluyó en Julio 2014), sin accesibilidad universal, en cambio, respetaron cuatro casetas telefónicas y CU-A-TRO mupis (muebles urbanos que pretenden funcionar como paradas de camión, tienen bancas y se caracterizan por desplegar anuncios publicitarios) que toman todo el ancho de la banqueta, hay muchos bolardos amurallando, no amortiguan alguna colisión ya que el tránsito fluye en sentido opuesto.  La fachada de este tramo peatonal corresponde a un hospital del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS). El IMSS se blinda, con rejas y sin corresponder al espacio público, a pesar de que su vocación es fomentar la salud de sus derechohabientes.  La Delegación Gustavo A. Madero no comprende al peatón y al IMSS no le importa el peatón. Esta banqueta es un punto es nodal, aglutina un sinnúmero personas por estar ubicado en una zona de equipamiento (hospitales, escuelas, clínicas, un centro comercial, oficinas del IMSS) y por su proximidad con el Estado de México, tiene el potencial de reivindicar al peatón al articular la intermodalidad al brindar trayectos seguros y agradables -a unos pasos se encuentra el Metrobús Euzkaro y el metro con las estaciones Deportivo 18 de Marzo y Potrero, así como transporte público concesionado cuyo destino es el Estado de México. Es prioritario que la administración pública que ejecute obras de rehabilitación o construcción de banquetas cumplan con los lineamientos y manuales de diseño universal, precise los materiales y mobiliario urbano adecuados con el contexto en que se incorporan, de lo contrario se tratará de un dispendio financiero que sólo acumule capas de cemento flanqueadas de bolardos inútiles. Aun no está claro si le corresponde a la Secretaria de Movilidad (SEMOVI, otrora SETRAVI) o la Autoridad del Espacio Público (AEP), sin embargo, la recién promulgada ley de Movilidad en su artículo 183, señala:

Con el objeto de garantizar un funcionamiento adecuado de las vialidades para el tránsito peatonal y vehicular, la SEMOVI; de conformidad con lo que disponga el Reglamento, publicará y mantendrá actualizado el Manual de Diseño Vial del Distrito Federal.

Expreso desde mi posición ciudadana que la AEP debe atraer lo concerniente a la normatividad en diseño de las banquetas con lineamientos y manuales en coordinación con SEMOVI. La AEP también ha demostrado dialogo ciudadano y la sensibilidad para atender la especificidad de los casos que le he presentado y solicitado en combinación con estudiantes, vecin@s y usuari@s directos del espacio público. La AEP debe ser dotada de certidumbre y atribuciones institucionales y centrales, aunque la tendencia y la reforma política apuntan a lo contrario, expreso que las delegaciones sólo deberían dedicarse a atender los servicios urbanos y no a ejecutar, ni contratar obra pública.  Mi experiencia en el «peregrinar» ciudadano en solicitar la recuperación de espacios públicos en la demarcación donde vivo, la Delegación Gustavo A. Madero, no ha estado a la altura de la seguridad y confort de l@s peatones (véase: https://ciudadsaludable.wordpress.com/2014/09/22/repara-una-banqueta-en-el-df-un-verdadero-viacrusis-publimetro-abril-2013/). Esta situación la he documentado tanto en la banqueta que he estudiado desde 2009 en Eje 4 Norte entre Insurgentes Norte y Prolongación Riobamba en la Colonia Capultitlán, en las banquetas y parques de la Colonia Industrial y las banquetas de la Colonia Palmatitla en Cuautepec Barrio Alto. *Ubicación de la banqueta que se muestra en las fotos: Insurgentes Norte esquina Eje 4 Norte, Delegación Gustavo A. Madero, Ciudad de México. @neoperla